Eusebi Güell (Barcelona 1846-1918) era un exitoso empresario y al mismo tiempo un hombre de gran cultura, muy asociado con la identidad catalana. En la Exposición Universal de 1878 conoció al joven arquitecto Antoni Gaudí (Reus 1852-Barcelona 1926) e inmediatamente detectó la creatividad del artista, convirtiéndose en su mecenas. La relación entre ambos fue mucho más que una relación mecenas-artista, fue una profunda amistad con fuerte comunidad de ideas tanto en lo artístico, lo histórico, lo social y lo religioso. De esta relación surgieron muchas obras encomendadas por Güell : el Palacio Güell, la Cripta de la Colonia Güell y la Bodega Güell. En todas ellas Gaudí pudo desarrollar un estilo que incorpora el glorioso pasado medieval de Cataluña, la influencia árabe y las nuevas ideas que comenzaban a desarrollarse en la arquitectura europea en base a formas orgánicas naturales Art Noveau, Modernismo, Sezession. Todo esto va a alcanzar una cima en el Park Güell.
El industrial catalán estaba cautivado por los jardines ingleses y había visto en sus viajes urbanizaciones rodeadas de estos jardines. Esto lo motivó a desarrollar un proyecto similar para Barcelona. Compró en 1899 dos grandes fincas sobre el llamado Monte Pelado (hoy Monte Carmelo) en las afueras de Barcelona, con un entorno totalmente natural y una espectacular vista sobre la ciudad y el mar y encomendó a Gaudí diseñar las áreas comunes de la urbanización. El terreno fue cercado y comenzaron los trabajos en 1900. El terreno fue dividido en 60 parcelas de unos 1200 a 1400 m2 pero sólo se podía construir sobre unos 200-240 m2. El proyecto apuntaba a la creciente alta burguesía de Barcelona y era conceptualmente lo que hoy llamaríamos un barrio cerrado.
Entre 1900 y 1914 se preparó el terreno y se construyeron los viaductos y el sistema de alcantarillado, se construyeron los edificios de entrada y otros auxiliares. Por último se construyeron sólo dos casas, una de ellas habitada por Gaudí. El proyecto fue un completo fracaso comercial. Hay varias razones que podrían explicar el fracaso: el lugar estaba lejos del centro de Barcelona y no había buenos medios de comunicación, la alta burguesía catalana temía enemistarse con el poder central de España si adhería a una propuesta tan teñida de nacionalismo catalán, etc. Ya hacia 1906 se vislumbraba esta situación, y sin embargo las obras continuaron hasta que comenzó la Primera Guerra Mundial en 1914.
En 1918 falleció Eusebi Güell y sus herederos decidieron posteriormente ofrecerlo en venta al Ayuntamiento de Barcelona, para convertirlo en parque público. Y aquí comenzó la historia de éxito ya que pasó a ser un paseo popular y lugar de realización de celebraciones públicas.
Actualmente el Park Güell es uno de los íconos de Barcelona y recibe una enorme afluencia de visitantes tanto locales como extranjeros (mayormente del resto de Europa y Latinoamérica). A pesar de que la entrada a la parte de los monumentos está regulada y que se cobra la entrada, en el último año lo visitaron 2,3 millones de personas.
Pero qué es lo que hace tan atractivo al Park Güell?
Les doy mi visión: cuando visité otras famosas obras de Gaudí como La Casa Milá (“La Pedrera”) o la Casa Batlló o la Sagrada Familia, quedé maravillado de las soluciones tan creativas para lograr por ejemplo, que una vivienda sea vivible y al mismo tiempo le transmita al propietario que vive en un lugar único en el mundo. Pero aun así las restricciones que impone una vivienda multifamiliar o una iglesia siguen existiendo. En cambio en el Park Güell es como si el comitente le dio absoluta libertad a Gaudí para hacer lo que su imaginación creadora le indicara. Por eso resulta un lugar donde se concretan formas que parecen salidas de un cuento de hadas.
Pero al mismo tiempo que crea formas irreales pero orgánicas y muy vinculadas a la Naturaleza, Gaudí ofrece soluciones totalmente racionales para la red de desagües, esconde una cisterna detrás de la escalera principal para almacenar el agua para riego, etc. La cisterna es custodiada por el famoso dragón con escamas a base de azulejos multicolores que representa al guardián de las aguas subterráneas. Este dragón se ha convertido hoy en el lugar donde todos los visitantes del parque se quieren sacar la foto, e inunda los negocios de souvenirs de Barcelona en múltiples presentaciones.
Hay otro notable aporte de Gaudí en el uso de materiales de bajo valor para los revestimientos, anticipándose a los métodos cubistas de Picasso y Miró. Con trozos de azulejos de diferentes tamaños y colores, construye hermosos diseños decorativos de bajo costo resistentes a la intemperie.
Un párrafo aparte merece la plaza superior concebida como un lugar de encuentro de los futuros residentes del complejo. Ahí la baranda que recorre el borde de la plaza fue diseñada como un interminable banco que puede acoger a muchas personas pero que, por su forma serpenteante permite al mismo tiempo la formación de pequeños grupos.
La visita al Park Güell me dejó varias enseñanzas. Un fracaso se puede llegar a convertir en un éxito, si se buscan sus aspectos positivos y se lo reconvierte adecuadamente. Viendo esta obra magnífica, construida mientras se preparaba en Europa una guerra devastadora, uno comprueba una vez más lo compleja de la mente humana, capaz de concebir simultáneamente escenarios opuestos.
En la próxima visita a Barcelona…no se pierdan el Park Güell!
Jorge Mandelbaum (julio de 2015)
15 Comments
Por esto de la pandemia suspendí viaje a España, pero el parque no era un lugar que estaba segura de visitar ya que algunos dicen que no lo vale, pero tu nota me ha reactivado las ganas y desperto curiosidad…así que espero conocerlo pronto. Me encanto el modo en que esta escrito y hace que veamos mas alla del «simple monumento». Gracias!
Mariana: seguramente tendremos revancha y volveremos a lugares que tanto nos gustan
Muy interesante la historia del parque Jorge. Sin dudas está entre los pendientes.
Saludos
Excelente texto de un lugar único en el mundo!
Muchísimas gracias por el comentario
Lo he visitado y quedé maravillado por toda la obra, espero poder volver. Gracias Jorge, te mando un abrazo
Gracias Antonio, yo también espero volver
Gracias x este articulo! Soy mosaiquista y ese lugar me parecio una maravilla!
A mi también me encantó y me motivó a escribir .
Hola Jorge!
Me encanto la historia! Estuve en Park Güell y me pareció maravilloso!!
Ahora que no podemos viajar por un tiempo es un gran momento para recordarlo y planificar una nueva visita
Felicitaciones por el post!
Saludos
MARU
Muchas gracias Maru por tu comentario
Gracias por el post! Cuando puedas viví en Barcelona en mi época de estudiante no se pagaba, así que iba regularmente a pasear. Después llevé a toda mi familia, uno por uno, y tengo memorias distinta de cada visita. Jorge, te invito a pasar por mi Blog donde tengo mucho de Barcelona (despiertaviajando.com).
Saludos desde Chile!
Muchas gracias por tu comentario. Con todo gusto voy a visitar tu blog.
Interesantisíma la historia del parque. Tuve la suerte de poder visitarlo, y, si bien sabía que era obra de Gaudi, desconocía la historia en profunidad. Si vuelvo a tener la suerte de viajar a Barcelona, visitaré nuevamente el parque pero ya lo veré con otros ojos!
Muchas gracias por el comentario. Es así, cada vez que volvemos a un lugar conocido, lo vemos con otros ojos.