En 1988 viajé por primera vez a conocer la región al norte de New York conocida como New England (Nueva Inglaterra). Era en Setiembre, y luego de pasar por Newport (Rhode Island) y Boston (Ma), fuimos a la zona del Mt. Washington en New Hampshire. Por la época del año, pude ver el comienzo de la temporada de cambio de color de las hojas de los árboles, un espectáculo que me encantó.
Regresaba en auto a New York y como ya estaba oscureciendo, decidimos parar en algún pueblo del camino para pasar la noche. Encontré un lugar muy lindo en una ruta del oeste de Massachusetts, llamado Stockbridge y me prometí volver para conocer la zona. Allí me sucedió una anécdota curiosa, en el check-in al poner entre mis datos personales que vivía en Argentina, el empleado del hotel me miró con asombro y me confió que el huésped más lejano que tuvieron, era de tan lejos como Venezuela. Ahí me di cuenta que no estaba en una de las zonas preferidas de los argentinos.
Volví unos años después en el comienzo del verano, como parte de un viaje al sudeste de Canadá. En esa oportunidad estaba todo muy verde y le dediqué un par de días a descubrir la zona. Como en ese entonces no había Internet y la posibilidad de reservar con anticipación, al llegar a Stockbridge me puse a buscar un alojamiento adecuado para mis pretensiones y posibilidades económicas. Así fue que de casualidad encontré un Bed and Breakfast (B&B) que me encantó («The Inn at Stockbridge»). Bastó entrar al gran living de la casa hermosamente decorado, donde se escuchaba una suave música y que el dueño de casa se acercara a presentarse y llevarme a recorrer las cuatro habitaciones que tenía el lugar, para que eligiera la que más me gustaba. También me ofreció una copa de vino con degustación de quesos, logrando que ya me pusiera a descargar el equipaje.
Cuando queremos hablar de los atractivos de The Berkshires hay que asociarlos a las distintas estaciones. Si bien los antiguos y tranquilos pueblos, los bosques y las suaves montañas están siempre, hay atractivos que se suman dependiendo de la época del año.
Así por ejemplo en Primavera el verde intenso de la vegetación y la tranquilidad de todos los lugares, ya que todos los pueblos son pequeños y mucha gente vive en las afueras, en medio de la Naturaleza. El Verano es alta temporada por las vacaciones en el hemisferio Norte, y es en Julio y Agosto donde se concentra la oferta cultural. El Otoño, especialmente en Octubre, es el período de cambio de color del follaje, un espectáculo inolvidable. Finalmente el Invierno es la temporada de los deportes de nieve, ya que es una zona de fuertes nevadas por su latitud y cercanía a grandes masas de agua.
En esta región de EEUU no hay rascacielos, ni grandes hoteles, ni masas humanas, ni aglomeraciones en las rutas, ni exhibiciones de riqueza. La vida transcurre a la vez refinada y apaciblemente. No hay paisajes espectaculares, pero todo está muy lindo y cuidado. Está en uno disfrutar de todo esto. Se percibe también la fuerte conexión que la zona tiene con su pasado y la inmigración mayormente inglesa.
Mi experiencia en las dos veces en que dediqué unos días a The Berkshires (06/92 y 10/08), fue en Primavera y Otoño. En general evito los meses de alta temporada y por eso no pude apreciar personalmente la oferta cultural de música, teatro y danza. Es una forma de combinar Naturaleza, con eventos de alto nivel y para todos los gustos.
Todas estas actividades se desarrollan en los distintos pueblos de esta región, que están a corta distancia uno de otro. Es famoso Tanglewood (a 8 Km de Stockbridge), un lugar que se convierte en sede de verano de la Orquesta Sinfónica de Boston (BSO), una de las mejores de EEUU. En forma consecutiva se desarrollan dos festivales, el de música clásica y luego el de Jazz. Son salas de concierto semiabiertas, donde parte del público se sienta en la platea y otra parte se sienta en un predio adjunto sobre el césped, y generalmente comiendo y tomando mientras se desarrolla el concierto. Esto permite que las familias con niños puedan también escuchar los conciertos. Las dos grandes salas están dedicadas a los grandes directores que estuvieron vinculados por mucho tiempo a la BSO, Serguei Koussevitzky (1924-1949) y Seiji Ozawa (1973-2002).
Un muy tradicional festival de danza es el Jacob´s Pillow Dance Festival que se desarrolla en Becket, a 24 Km de Stockbridge.
En Lenox, a 11 Km de Stockbridge, hay posibilidad de ver teatro clásico con obras de Shakespeare.
El arte tiene también su lugar en esta zona y un espacio muy tradicional es visitar la casa-museo de Norman Rockwell (1894-1978), un famoso ilustrador de la vida americana que vivió sus últimos años en Stockbridge. Su notable talento para el dibujo le valió ser ilustrador oficial de la revista de actualidad Saturday Evening Post desde 1916 hasta 1963, siendo además diseñador de publicidades para las principales marcas norteamericanas.
Sus obras muestran en su primer etapa, momentos la vida cotidiana, las convenciones sociales y la influencia del cine, siendo las imágenes muy amables y de rápida aceptación pública. En cambio adopta un carácter más serio cuando incursiona en las críticas sociales, o en la exaltación de valores y también cuando realiza la serie Libertad, en los tiempos de la Segunda Guerra Mundial.
En la posguerra vuelve a los exitosos temas familiares, a veces con un toque de ironía. En los años 60, con el comienzo de las luchas por los derechos civiles pinta en 1964 “El problema con el que convivimos todos”. Esta pintura se basa en el caso real de Ruby Bridges, una niña afroamericana de 6 años que debió ser escoltada por agentes del FBI para ir a una escuela de blancos, en los comienzos de la integración racial. Rockwell fue un firme defensor de una sociedad multicultural, en una época en que no era nada común esa posición.
El último plato fuerte en esta zona, es el cambio de color de las hojas de los árboles en el otoño. Esto ocurre en muchas partes del mundo pero lo especial en New England es que hay inmensos bosques (cubren el 70% de la superficie).
Hay árboles cuyas hojas viran del verde al amarillo, al ocre, al naranja y al rojo intenso dependiendo del tipo de árbol. El fenómeno ocurre entre fines de Setiembre y fines de Octubre (baja de Norte a Sur) y es especialmente intenso en el llamado Indian Summer (verano indio). El clima es agradable pero las noches son cada vez más largas y frías, y esto cataliza la reacción química que frena la producción de clorofila en las hojas (es el pigmento verde). Al no estar la clorofila aparecen los pigmentos que estaban ocultos, como el caroteno (amarillo), los taninos (marrón) y antocianina (rojo) provocando esa explosión de colores. Los álamos y abedules se asocian con los amarillos intensos. El nogal americano, el arce y el serbal con el naranja y el roble rojo, arce rojo y el cerezo con los rojos escarlata.
Mi recomendación es ir a esta región de EEUU sabiendo que tipo de cosas va a encontrar uno según la época del año, o mejor aún eligiendo la época del año en función de lo que uno quisiera ver. Esto es diferente a New York, Miami o Los Ángeles, ofrece belleza natural y gente amable y educada, junto a las tradiciones de una región a la que llegaron los primeros colonizadores.
Espero que pronto podamos volver a disfrutar de esta región tan especial.
11 Comments
Realmente los colores son de una paleta divina que la naturaleza nos brinda, tuvimos la oportunidad de visitar la zona,
y nos llevamos la misma impresion, tampoco pudimos apreciar la oferta cultural, que ahora apreciamos contigo.- tambien pudimos alojarnos en un BB, y lo revivimos igual que uds., repasando tambien Noruega y Bergen nos trajo hermosos recuerdos y en viaje desde los fiordos a Estocolmo paramos a pasar la noche en un pueblito donde se casaba una de las parejas de ABBA, (año 1983), hay que revivirlo, muchas gracias
Qué bueno compartir estas lindas experiencias!. Muchas gracias por tus palabras
como siempre quedo impresionado con tu forma de apreciar la naturaleza combinada con tan interesantes desarrollos culturales adelante +++++ gracias
Muchísimas gracias Miguel por tus palabras
Un lujo compartir esta explosión de sentimientos ante imágenes que impactan en el alma el placer de vivir.
Seguí así
Un abrazo
Muchísimas gracias Julio por tu lindo comentario.
Muy buena toda la descripción. Pese a haber estado cerca de allí , pero en época distinta, tus escenarios me parecieron muy originales. Una mención especial a tus comentarios sobre N. Rockwell a quien no conocía y cuyo cuadro me traslado a Little Rock y aquella niña en la escalinata en los 60
Muchas gracias Roly por tu comentario
Jorge, muy amenas e instructivas tus explicaciones. Sin haber estado en esos hermosos lugares, puedo disfrutarlos mucho. Muchas gracias por compartir.
Me alegra Tomás que los hayas disfrutado. Gracias por tu comentario
Gracias Jorge por permitirme pasear por un lugar que no conozco!!! Y que lindo Tanglewood!!!!