Estamos en Febrero de 1981, estoy viajando por USA y paso unos días en San Francisco. Se me ocurre que puede ser interesante conocer el Museo de Arte y al llegar descubro que hay una exposición temporal: “Expresionism: a German Intuition (1905-1920)” (Expresionismo: una intuición alemana 1905-1920). No tenía idea de qué era pero decidí probar (aclaro que en esa época yo recién empezaba a interesarme en la Historia del Arte) y me produjo un tremendo impacto. Esas imágenes tan especiales y con colores tan vivos me transmitían una fuerza salvaje. Eran obras de pintores expresionistas que me motivaron a profundizar en este tema a través de cursos y lecturas. Por eso quiero contarles algo de uno de ellos.
En Argentina cuando oímos el apellido Kirchner se generan fuertes emociones que barren un amplio espectro, desde el amor incondicional a un odio equivalente.
Pero aquí quiero hablarles de un artista, Ernst Ludwig Kirchner, que unos cien años atrás hizo un importante aporte al arte a través de la pintura y el grabado.
Kirchner nació en 1880 en el norte de Baviera, Alemania donde su padre trabajaba como ingeniero en una fábrica de papel. En la adolescencia vivió en Chemnitz, Sajonia (cerca de Dresde) y es allí donde comienza a manifestarse su talento artístico. Para complacer a su padre comienza sus estudios de Arquitectura en Dresde donde enseguida se hace amigo de Fritz Bleyl. Con él comparte su pasión por el dibujo y la pintura que practican intensamente en paralelo a sus estudios. Kirchner asiste por un semestre en 1903 a un curso de arte en Munich, (una ciudad más cosmopolita que Dresde) lo que le permite ver exposiciones de artistas como Toulouse-Lautrec, Seurat, Pissarro y van Gogh. Es especialmente este último el que lo impacta profundamente y va a influir en sus primeras etapas.
Vincent van Gogh (1853-1890): La noche estrellada (1889)
Kirchner y Bleyl conocen en la Universidad a otro par de amigos algo más jóvenes que ellos que comparten los mismos ideales artísticos. Se trata de Erich Heckel y Karl Schmitdt-Rottluff que también estudian Arquitectura para justificar las asignaciones mensuales de los respectivos padres.
Desde el comienzo estos jóvenes artistas están decididos a crear algo nuevo y ejercer una influencia revolucionaria en el arte, y además pretenden hacerlo en conjunto como una comunidad artística. Esto se entronca con el arte popular y la actividad de artesanos en el medioevo y artistas más recientes que deforman la imagen y/o los colores alejándose de los ideales clásicos para mejor expresar y transmitir emociones. Así como reconocen la influencia de van Gogh, Gauguin y Munch rechazan las reglas de la pintura académica y buscan alejarse de la influencia francesa e italiana para crear un arte del norte de Europa.
Edvard Munch (1863-1944): Ansiedad (1894)
Se suele llamar Expesionismo a la obra de estos artistas aunque es un término más amplio ya que involucra a varios grupos y a artistas individuales que con diferentes características han creado obras que quebrando la forma y usando el poder del color tratan de transmitir emociones al espectador.
El 7 de junio de 1905 estos cuatro amigos fundan el grupo artístico El Puente (Die Brücke) liderados por Kirchner que redacta el programa en unas pocas frases:
“Con fe en el desarrollo, en una generación creativa y capaz de disfrutar de la vida, convocamos a toda la juventud; y nosotros como juventud portadora del futuro, queremos procurarnos vida y brazos libres frente a las viejas fuerzas establecidas. Todo aquel que exprese directamente y sin falsías lo que le mueve a crear, pertenece a nuestro grupo”
La idea era enfrentar con un arte nuevo y joven, el arte académico asociado a la burguesía industrial de la era del Kaiser Guillermo II.
Para concretarlo convivieron en un taller común y hacían salidas al campo para pintar, actuando sus amigas como modelos. A través del tiempo lograron un estilo homogéneo con la fuerte influencia de Kirchner. En los años siguientes se retira Beyl , se incorpora el pintor Emil Nolde por un tiempo y también Max Pechstein y Otto Mueller.
E. L. Kirchner: Cabeza de mujer delante de girasoles (1906)
Esta pintura es un ejemplo del período temprano del artista y muestra sus esfuerzos por alcanzar una mayor expresividad. Los girasoles es quizás un homenaje a su ídolo van Gogh a quien también se vinculan los colores utilizados y la pintura pastosa aplicada con pinceladas dinámicas y cortas.
E. L. Kirchner: Marcella (1909-1910)
Un tema sobresaliente en la obra de los artistas de El Puente es el desnudo. La representación del cuerpo humano desnudo tanto en el taller como al aire libre los hacía sentir cerca de su ideal de una vida libre y acorde con el ritmo de la Naturaleza.
Hacia 1910 comienzan a mudarse a Berlín lo que produce un fuerte impacto en la temática de las obras. Aparecen los personajes de la gran ciudad, el caos y el anonimato. Allí conoce a quien será su compañera por el resto de su vida, Erna Schilling.
El año 1913 es el de la disolución de “El Puente” por desavenencias entre Kirchner y el resto del grupo. El detonante fue la publicación por parte de Kirchner de una “Crónica del Grupo de Artistas del Puente” que, en opinión del resto de los artistas, sobrevaloraba su obra.
E. L. Kirchner: Mujeres en la calle (1915)
Esta obra que muestra un Kirchner plenamente maduro, refleja el impacto de una gran ciudad como Berlín frente a la provinciana Dresde del período anterior. El motivo de Mujeres en la calle está sumergido en un colorido irreal que refuerza con su luminosidad la expresión de los angulares cuerpos femeninos. El rayado al pincel expresan su nerviosismo y lo vinculan con el Futurismo que se desarrollaba en esa época en Italia.
Libre de los lazos que lo ligaban a sus amigos, Kirchner comienza a seguir su propio camino enfocándose en la ciudad, sus calles y sus personajes. Pinta así algunas de sus mejores obras pero, lamentablemente hacia 1914 comienzan sus crisis nerviosas que lo acompañarán por el resto de su vida. Para agravar la situación se enroló en el ejército como “voluntario involuntario” y, a pesar de no ir al frente de batalla, tuvo un colapso físico y psíquico que hizo que lo eximieran del servicio militar. Esto se refleja en su Autorretrato como soldado.
E. L. Kirchner: Autorretrato como soldado (1915)
Esta obra transmite claramente su sufrimiento psíquico y físico que vuelven imposible su trabajo como artista. Da la espalda a una de sus obras y tanto el muñón como sus ojos vacíos, muertos expresan junto con los colores la creatividad apagada de ese tiempo.
En los siguientes años fue internado varias veces por sus trastornos mentales (manía persecutoria, ansiedad), siempre temiendo que si sanaba volvería al servicio militar, hasta que en 1918 decide mudarse a un pequeño pueblo cercano a Davos (Suiza).
En Davos comienza una nueva etapa en la vida del artista, tanto en lo personal como en lo que hace a su obra. Su salud mental se restablece sólo parcialmente y el aislamiento sumado a la falta de contacto con sus amigos artistas, hicieron que su carácter empeorara volviéndose temeroso y desconfiado. Cuando Erna, su pareja, le envía desde Berlín las obras conservadas en su taller, reelabora algunas poniéndoles una fecha más temprana para justificar sus pretensiones de haber sido el pionero en el desarrollo de la estética del grupo El Puente.
También escribe elogiosas críticas de sus obras usando un seudónimo que según él era de un supuesto médico amigo (Louis de Marsalle), exhibiendo la necesidad de éxito y reconocimiento que sentía. También sufrió penurias económicas ya que el deterioro de la situación en Alemania a fines de la década del ´20 hacía muy difícil la venta de sus obras que él necesitaba para sobrevivir. A pesar de que la exhibición de sus pinturas era exitosa, especialmente en Suiza, tuvo que llevar una vida frugal durante ese período.
Con respecto a su obra, se vuelve muy visible la presencia del paisaje montañoso de Davos con sus cabañas y sus campesinos, con su vida subordinada a la Naturaleza.
E. L. Kirchner: Pastizal alpino a la luz de la luna (1919)
E. L. Kirchner: Tres desnudos en el bosque (1934/35)
En sus últimos años aparece un nuevo estilo donde la típica pincelada de Kirchner se transforma en una película de color en forma de placas. Se lo suele llamar “estilo abstracto”.
A lo largo de toda su carrera Kirchner desarrolló, en paralelo con la pintura, una importante obra gráfica, por medio del grabado en madera.
El comienzo del año 1933 marca por un lado un creciente reconocimiento de su arte en Suiza, pero, por otro lado se produce el ascenso al poder del nazismo en Alemania. Le piden su renuncia a la Academia Prusiana de Arte y se cuestiona que su pintura no responde a los cánones establecidos por el nazismo. Kirchner que planteó como uno de los principales objetivos de la fundación del grupo El Puente lograr un arte genuinamente alemán, libre de la influencia del arte italiano o francés, ve que le cuestionan la “germanidad” de sus obras. Esto, sumado a nuevos problemas de salud, hacen que su producción se reduzca en estos años.
La campaña para “limpiar” el arte alemán alcanza un climax en 1937 con la confiscación de 639 obras de Kirchner. En ese año comienza la Exposición de “Arte Degenerado” en Munich que luego se traslada a muchas otras ciudades alemanas, donde entre obras de otros artistas hay 25 óleos de Kirchner.
En 1938 su situación se deteriora severamente por su aislamiento y su percepción de la inminencia de una nueva guerra. Su depresión se agudiza y en Junio lo lleva al suicidio.
En su homenaje Davos inaugura en 1992 el Museo Kirchner que albera la mayor colección de sus obras.
Me resulta increíble que esa exposición a la que asistí casi por azar haya dejado esa huella tan profunda en mí. Pero el Arte es así, muchas veces nos llega profundamente y cambia algo en nuestro interior, generalmente para bien.
Jorge Mandelbaum (Enero 2020)
8 Comments
Muy bueno!!!
Muchísimas gracias
Como siempre ,excelente.!! Un gran abrazo
Muchas gracias Carlos por tu comentario
Muy bueno tu blog. Gracias por compartirlo.
Muchas gracias Marta por tu comentario
Gracias por compartir tu excelente trabajo , fruto de tu poder de observación y teson
Abrazo
Muchísimas gracias Ricardo por tus palabras